Julianna ayudó a Casca a darse cuenta de su verdadero yo como lesbiana, la ayudó a lidiar con su divorcio, la ayudó con el estrés de empezar de nuevo y ahora está en un nuevo camino en la vida y es feliz. Casca expresa su admiración por Julianna y finalmente admite que ella también se ha enamorado de ella. Julianna se sienta en silencio por un momento y luego responde que ya no puede ser su psiquiatra, lo que sorprende a Casca. Pero luego Julianna rápidamente reformula para explicar que lo que QUISO QUISO es que ella también siente algo por Casca, pero que no puede actuar en base a esos sentimientos mientras sea su psiquiatra.